La Secretaría de Salud (SESA) del estado de Querétaro, se suma a la conmemoración del Día Mundial de los Defectos del Nacimiento, que se conmemora cada 3 de marzo, con la finalidad de realizar acciones para prevenirlos.
Los defectos de nacimiento son las alteraciones que afectan al embrión o feto. Dañan la capacidad de funcionamiento del cuerpo e impiden que los recién nacidos tengan un proceso normal de desarrollo. Entre los más frecuentes se encuentran anomalías del tubo neural, que afectan de forma grave el cerebro y la columna vertebral y es una de las principales causas de muerte y discapacidad permanente en el mundo.
De acuerdo con el informe del año 2022 del Sistema de Vigilancia Epidemiológica de Defectos al Nacimiento (SVEDAN) se notificaron dos mil 689 casos a nivel nacional, con una incidencia de 127.03 casos por cada 100 mil recién nacidos vivos. Morelos y Campeche reportaron las incidencias más altas con 547.8 y 338.8 casos por cada 100 mil recién nacidos. En el caso de Querétaro se reportaron 39 casos.
Los principales defectos reportados fueron las malformaciones cráneo-faciales (labio y paladar hendido es el más frecuente), seguidas de los defectos del tubo neural (con mayor frecuencia el mielomeningocele) y la displasia del desarrollo de cadera.
Con relación a las acciones para la prevención primaria de las anomalías congénitas se recomienda:
- Asegurar que las mujeres eliminen o restrinjan el consumo de sustancias nocivas, particularmente el alcohol.
- Evitar durante el embarazo la exposición ambiental a sustancias peligrosas, como los metales pesados y los plaguicidas.
- Mejorar la dieta de las mujeres en edad fecunda, para ello garantizar un aporte suficiente de vitaminas y minerales en la alimentación, en especial de ácido fólico, mediante el suministro diario de complementos por vía oral o el enriquecimiento de alimentos básicos como las harinas de maíz o de trigo.
- Controlar la diabetes preconcepcional y gestacional con la atención médica para el control del peso, dieta y administración de la insulina cuando sea necesario.
- Garantizar que durante el embarazo la exposición a los medicamentos y a radiaciones por razones médicas (por ejemplo, para el diagnóstico por la imagen) esté justificada.
- Aplicar la vacuna contra el virus de la rubéola, en las niñas y las mujeres. La rubéola es prevenible mediante vacunación en la infancia.
- Protegerse contra las picaduras de mosquitos ya que algunos pueden transmitir infecciones.
Asimismo se recomienda la ingesta de ácido fólico (vitamina hidrosoluble del grupo B), ya que es un nutriente esencial y el ser humano no es capaz de sintetizar; el consumo antes y durante el embarazo es beneficioso, pues previene defectos del tubo neural, algunas cardiopatías congénitas, hendiduras bucofaciales, síndrome de Down, desórdenes del espectro autista, infecciones obstétricas, preeclampsia, hemorragia uterina, desprendimiento abrupto de la placenta, retardo del crecimiento intrauterino y prematuridad.
También contribuye a preservar una embriogénesis y placentación normal y no se han demostrado efectos adversos por su uso. Debe ser consumido por prescripción médica.
Previo al embarazo, con el fin de garantizar que dicha vitamina tenga el efecto deseado, se indica la presentación de tabletas de 0.4 miligramos y se toma una cada 24 horas durante 90 días. En los 198 centros de salud se encuentra disponible el ácido fólico y se entrega de forma gratuita.