Esta parroquia lleva el nombre de uno de los ángeles más importantes de la Biblia, San Miguel Arcángel.
La historia de la parroquia se remonta a los tiempos de la colonización española en el siglo XVI. En ese entonces, los españoles construyeron una iglesia en Huimilpan y la dedicaron a San Miguel Arcángel, quien se convirtió en el patrono de la ciudad.
Durante el siglo XIX, la parroquia sufrió un importante incendio que destruyó gran parte de sus instalaciones. Sin embargo, los habitantes de Huimilpan se unieron para reconstruir la parroquia. Los trabajos de restauración se llevaron a cabo en su totalidad.
A sus afueras se encuentran las mujeres Artesanas donde atreven a la venta arte creado por sus propias manos, muñecas, pulseras, aretes, collares, tejidos e imágenes del Santo Patrono.
La Coordinadora de Turismo de este hermoso Municipio Carmen Cárdenas Franco hace una extensa invitación para que vengan a conocer las maravillas de Huimilpan.
